Terminamos la primera parte de la gira “contr(A) la elitización del sonido”, también bautizada por la bandita como “La amenaza elegante”. Fue sin duda un fin de semana que puso a prueba las motivaciones para salir a echar el rocanrol y como debe ser, nos invito también a agarrar de frente esos temidos riesgos que la carretera por “la mala” te obliga a ver y experimentar en carnes propias. Un necesario atreverse a romper con la rutina; y no solo de la vida cotidiana, si no que también de la forma en que se podría tener algunas expectativas en lo musical y en sus potencialidades sociales que te podrían llevar a preguntarte: ¿por que es tan importante salirse del conformismo y de las comodidades domesticas para ir a tocar y dar el rol a la provincia?
Las respuestas son un buen, pero entre esos pensamientos cabe también el de comprender principalmente que las grandes urbes no por que gocen de poseer cantidad de medios y crean ser auto suficientes -a fuerza de extractivismo- significa que deban ademas definir de que manera se tienen que hacer las cosas fuera de ellas, ya sea en el ámbito de las gestiones practicas del sonido o incluso en el campo de lo estético y sus posibles representatividades -que a menudo excluyen las realidades alejadas de la metrópolis-.
Ya que estas practicas terminan por subordinar a nuestros queridos cuates de las provincias mexicanas; a someterse a pensar y creer que de no ser de la manera en que aparece en las páginas web de los grandes medios autodenominados independientes -que en realidad son otro monopolio jactándose de hacer “periodismo musical”- o de no ser que se contrate agencias de ‘booking’ con mercenario incluido encargado de exigir insostenibles tarifas pues resulta casi imposible o inútil hacer el esfuercito de organizarse en bola, poner de la propia bolsa, persignarse y así con lo mínimo esencial darle marcha a nuevos tipos de expediciones verdaderamente autogestivas y no como algunos por ahí se llenan la boca. Con esta palabra que actualmente por lo menos en el campo de la música-sonido ya parece albergar variedad de ambiguas -y hasta contradictorias- denominaciones en los usos que se le esta dando en 2024.
Lo digo por que la auto-gestión que nos convoca es la que solo es posible construir desde abajo, desde la <<supuesta nada>> y con la importante premisa de mantenerse permanentemente al margen de las continuas cadenas de explotación, de abuso, y de sus micro y macro reproducciones, así como de sus respectivas jerarquías sistematizadas. La que se colectiviza per se y propone adaptarse a las necesidades de quienes la integran poniendo especial atención en no apelar a ninguna fuerza de coacción externa que pretenda tener injerencias dentro de ella así como velando a toda costa por su propia emancipación a nivel individual y colectivo.
Y es por esto que es fácil desconfiar de iniciativas de organizaciones para la música-sonido cuyo origen es el privilegio, aquel tradicional nepotismo cleptocrático y esa constante actitud de: por omisión, aparentar que las élites las crean otros y que los que les permiten seguir operando no son quienes necesariamente las asumen como su modelo de acción, en este caso: sónica. O una falaz manera de dejar el trabajo sucio a esa estructura burocrática y de exclusión tan arraigada pero que bajo el debido rigor analítico y pensándolo bien, funciona solamente si se le sigue otorgando el poder de que funcione y solo si se le regala la disponibilidad para que esta entidad haga lo que quiera con las personas que por uno u otro motivo viven la desgracia o el despiste de caer en sus redes de explotación.
La autogestión -en cuanto a administración autónoma se refiere- seria entonces la clave para el desarrollo de sonidos, voces, diálogos, representatividades y espacios inter-sónicos que también pongan en entredicho todo ese hegemónico modelo que no es mas que heredero de la raquítica situación en la que el priísmo nos dejo con sus apadrinamientos y mecenas a elites culturales y que parece no haber cambiado nada a lo largo del siglo XXI. Ah bueno! ahora finge una prefabricada simpatía progresista y es extremadamente meticuloso con la linea grafica de sus modelos de marketing. Pero fuera de eso no puede evitar simular que representa una supuesta idea colectiva de presunta subversión cuando en la realidad su modus operandi es mas el de una heterogestión propia de los modelos corporativos y con suerte aspiraría a ser una cogestión de esas que intentan crear la sensación de inclusividad a quienes realmente operan la parte productiva del asunto pero que con la otra mano sigue en cofradía con la misma estructura verticalista que oprime a los ya mencionados obreros, que son quienes hacen posible cualquier operatividad del mismo.
Con todo esto nos referimos a una autogestión en tanto a que haga un frente contra esa absorción conceptual engendrada por la aberrante idea de la híper productividad capitalista que induce al miserable deseo de auto explotarse. Una autogestión que proponga hacerle un boicot total a aquella ahora normativa concepción empresarial que inunda cada vez mas el imaginario publico y la internet con ideas de emprendimiento y de invitaciones a asimilar que el sistema capitalista es lo único que tenemos y que desagregarse o proponer la invención y desarrollo de otras formas de relacionarnos por su -necesaria- cualidad utópica es considerado imposible. Pues bueno, ahora si que como dijo un ilustre amigo colimense <<cualquiera que se alinea a un partido político de plano no tiene imaginación>> y así de igual manera con este sistema socioeconómico y sus regímenes culturales impuestos; que tampoco se van a tocar el corazón cuando de pronto ya no califiquemos en sus requisitos económicos, estéticos y publicitarios.
En fin, devolverle esa dotación de significado y valor que alguna vez tuvo la palabra autogestión requiere de una urgente reversión de varios de los paradigmas que hoy se dan tan por sentados. Comenzando por retomar la idea de la defensa del territorio desde la noción del territorio mismo representado por la autonomía que impera en nuestro ser y la capacidad de ser productores permanentes de nuestros propios deseos. Deseos de subvertir los regímenes de la hegemonía para que al menos por un momento -o para siempre- a los de arriba les toque experimentar lo que es realmente cargar el peso de abastecer una insaciable sociedad de consumo en sus hombros y que a los de abajo nos toque maniobrar por fin con infraestructuras dignas para el desarrollo de programas y agenciamientos que por su propia naturaleza y origen reivindiquen el sentido horizontal y colectivo de las lógicas organizativas de hoy y del mañana.
NTDN + Perros Plaga + Cáustica Espástica el 25 de marzo de 2024. La fotografía la tomo Rodrigo Javier de las trocas GP después de que se retractaran de tacharnos de mariguanos.